…A ti…siempre a ti…siempre tú…
Me has vuelto a pintar el mundo
de colores infinitos,
de amaneceres sin nombre
de estrellas, de muñequitos,
y me enseñas a ir despacio,
a parar el tiempo, a cantar bajito,
a caminar de otra forma,
a ver los días más bonitos;
has despertado mis sueños
y hoy quiero soñar contigo,
trajiste la primavera
atadita a tus deditos;
tu sonrisa enseñó al alma
esa magia y ese ritmo
que se han colado en tus ojos
como la mar, azulitos;
y he descubierto contigo
un querer tan puro y limpio
que no habrá ya en este mundo
otro amor tan infinito.